El trabajo infantil en el siglo XIX. Fundación Francisco Largo Caballero. El lema "La letra con sangre entra" es llevado a la práctica, la imagen muestra a niños trabajando sentados sobre un taburete y sujetos por el cuello mediante una cuerda. Las movilizaciones obreras dan como resultado que en 1873 se apruebe la Ley sobre Condiciones de Trabajo en las Fábricas, Talleres y Minas que prohíbe el trabajo a los menores de diez años, limita la jornada a cinco horas para los niños menores de trece años y las niñas menores de catorce, y obliga a los empresarios cuyos establecimientos estuvieran «a más de cuatro kilómetros de lugar poblado a crear escuelas cuyos gastos serán indemnizados por el Estado».